La vida fragante ¿Cómo se explica tal vida? Por Santiago A. Stewart “Por tanto, todos nosotros, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.” ( 2 Corintios 3:18 ) “Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo como Señor, y a nosotros, como vuestros siervos por amor de Jesús. Porque Dios mando que de las tinieblas resplandeciese la luz; es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo. Pero, tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros.” ( 2 Corintios 4:5-7 ) Durante el mismo tiempo en que fui salvado, una joven llamada Elena Ewan también se convirtió. Lo mismo sucedió durante la manifestación de Dios en la ciudad de Glasgow, Escocia. En ese entonces ella era solamente una muchacha delgadita...